Invertir en propiedades de obra nueva en Mauricio

Con su naturaleza exuberante y su clima suave, Mauricio es un destino que atrae cada vez a más expatriados, jubilados jóvenes e inversores en busca de una segunda residencia. Desde hace algunos años, los extranjeros no residentes pueden invertir en propiedades nuevas en la isla, e incluso beneficiarse de una serie de ventajas.

Mauricio, un paraíso para los inversores extranjeros

El mercado de la segunda vivienda, dominado durante mucho tiempo por las propiedades de lujo, es ahora accesible a un mayor número de personas. Los inversores extranjeros pueden encontrar apartamentos nuevos por tan sólo 160.000 euros.

La vivienda de obra nueva está en auge en la isla. La mayoría de las nuevas promociones están situadas en primera línea de playa y ofrecen servicios de lujo, como balnearios y campos de golf. Los compradores tienen de donde elegir, con pisos y casas en Asmara, villas de lujo en Domaine d'Anahita, Domaine de Mahé, villas Azuri y Marguery...

Invertir en bienes inmobiliarios en Mauricio puede ser una opción atractiva. La isla es visitada constantemente por turistas, y el clima del país hace que los propietarios puedan alquilar sus propiedades durante todo el año. La mayoría de las fincas o complejos turísticos ofrecen servicios de gestión de alquileres, lo que garantiza a los propietarios unos ingresos durante los meses en que no están ocupando su propiedad.

La popularidad de los bienes inmuebles en Mauricio también se explica por el benévolo régimen fiscal de la isla para los expatriados a los que se ha concedido la residencia. No existe impuesto sobre el patrimonio inmobiliario (IFI), ni impuesto de sucesiones, la tasa de imposición general es de 15%, no hay doble imposición (sobre todo para los franceses), ni impuesto sobre plusvalías en la reventa, ni impuesto sobre bienes inmuebles, ni impuesto municipal...

Planes de inversión

Para regular el mercado inmobiliario en Mauricio, y el de la segunda vivienda en particular, el Gobierno y la Junta de Inversiones (BOI) han introducido directrices que rigen las transacciones inmobiliarias extranjeras. Las compras por parte de extranjeros están reguladas por el PDS (Property Development Scheme, que también incluye las compras R+2) y la Smart City.

El Plan de Promoción Inmobiliaria (PDS) regula la adquisición de viviendas por no residentes. Se aplica a las viviendas de nueva construcción y a las compras sobre plano en residencias de lujo, seguras, con zonas de ocio y servicios de gestión. No hay precio mínimo de compra. Los compradores extranjeros pueden optar a la residencia si invierten más de 500.000 dólares (unos 450.000 euros). El plan R+2 permite la compra de una vivienda en copropiedad en un edificio más pequeño de al menos 2 plantas.

El objetivo del Plan de Ciudades Inteligentes (Smart City Scheme, SCS) es desarrollar promociones inmobiliarias de uso mixto (oficinas y viviendas) junto a zonas comerciales, espacios verdes e instalaciones de ocio. La idea es crear ciudades dinámicas que incorporen tecnologías inteligentes y respetuosas con el medio ambiente.

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